viernes, 11 de septiembre de 2009

Volvió una noche

Foto Diario Clarín
El regreso del Tigre

El regreso del Tigre, obra de Luis Agustoni que volvió a escena después de 20 años, llegó a la sala Neruda del Paseo La Plaza, protagonizada en esta oportunidad por Luis Brandoni y Patricio Contreras, con la dirección de Luis Romero.

En el mundo cotidiano y sereno del matrimonio de Dimas (Luis Brandoni) y Luisa (Florencia Raggi) en el que tiene abrigo y seguridad la adolescente quinceañera Teresa (Celeste Geroz), llega la noticia inesperada de El regreso del Tigre (Patricio Contreras).
El apodo de Tigre le había sido dado en su juventud de músico rockero y aún hoy lo mantiene a pesar de que vive en Italia, ha formado su propio estudio de grabación y sigue con su grupo de rock aunque ya peina canas.

El romance vivido en los años juveniles en la Argentina se quiebra ante el anuncio del embarazo de Luisa. Entonces, el Tigre no encuentra mejor camino que abandonar el país y desaparecer sin dar señales de vida durante 15 años.

Sin embargo, un accidente sufrido en Europa lo acercó peligrosamente a la muerte y cuando se vio recuperado decidió volver para conocer a su hijo o hija y afrontar los deberes de padre.
Dimas, el actual esposo, siente la conmoción que provoca la insólita presencia y no puede evitar lo que él supone la comparación que pueda hacer Luisa, su mujer, posiblemente deslumbrada por el halo de bohemia del viejo rockero. Pero lo que pasa a primer plano es vencer el resentimiento de la joven por el padre ausente y el acercamiento y la aceptación de quien le dio la vida.

La actuación de Brandoni se destaca ampliamente por la naturalidad de sus reacciones que lo acercan a cualquier porteño y por la complicidad que hábilmente crea entre el público y él.
Contreras se pone en la piel (y en la vestimenta de cuero propio de los jóvenes rockeros) de un personaje que ha madurado más lentamente de lo que debía y que trata de paliar los años de ausencia asumiendo tardíamente el rol de padre.

La dama en cuestión lucha entre el rencor por el abandono y la valentía de su marido que le da la libertad de resolver su pasado a pesar de la angustia que le crea el temor de perderla.
Por su parte, la joven Gerez se luce a través de una amplia gama de estados que la llevan de la rebeldía inicial que rechaza violentamente a su padre, para transitar inteligentemente por un recorrido emotivo hasta la aceptación y encuentro final.

En resumen, una historia sin aventurarse en extrañas honduras, jugada por un elenco encabezado por dos grandes actores y una prometedora joven.

El regreso del Tigre se presentará de miércoles a viernes a las 20.30, sábados a las 20 y a las 22, y domingos a las 19.30, en la sala Neruda del Paseo La Plaza.

Fuente: Hoy

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