La directora teatral presenta Querida mamá o guiando la hiedra. La obra ahonda en el vínculo madre-hija, otorgándole a cada acción y detalle de la rutina diaria un nuevo significado, que va más allá del día a día.Querida Mamá o guiando la hiedra, se estrena el sábado en el Patio de Actores (Lerma 568, Buenos Aires), una puesta de Laura Yusem sobre cuentos de Hebe Uhart.
La obra ahonda en el vínculo madre-hija (que interpretan Julieta Alfonso y Martha Rodríguez, respectivamente), otorgándole a cada acción y detalle de la rutina diaria un nuevo significado, que va más allá del día a día.
Creando una atmósfera donde la rutina se vuelve algo trascendente, la directora teatral Laura Yusem –que también fue la encargada de la adaptación del texto de la obra– desmenuza en esta puesta uno de los vínculos de sangre más significativos, tratando de echar luz sobre lo bello y lo trágico de lo cotidiano.
–¿Por qué eligió un cuento de Hebe Uhart para poner en escena?
–Cuando en 1970 debute en el campo de la dirección teatral, lo hice con la versión de un cuento de Heber Uhart: "Un pájaro gris, medio gordo, de pico corto". El título aludía a la descripción pseudo científicas del gorrión, la más certera que se les ocurría a los falsos ornitólogos que poblaban la escena. Desde entonces, mi admiración por la singular escritura de esta autora de culto fue permanente. Hoy, casi 40 años después y motivada por su cuento "Querida mamá", me propuse retomar esa tarea dramatúrgica, básicamente con tres de sus libros, Dios, San Pedro y las almas, El Budín esponjoso y Camilo Asciende.
–¿Qué le atrae de esta autora?
–He puesto en escena muchísimos autores argentinos porque creo en ellos y creo en nuestra lengua, pero no encuentro en otra que en Uhart la implacable inocencia que me atrae de su narrativa. Entre estos libros y la escena, sólo existe una delgada bruma que me gustaría atravesar.
–¿Qué aspecto de la historia quiso enfatizar en la obra?
–No busco hacer costumbrismo ni el relato de una "familia disfuncional" (tan de moda), sino adentrarme en la espesa opacidad de los hechos de la vida cotidiana, el devenir afectivo que tan certeramente te observa y trasmite esta autora. Mi propósito es, siempre a través de fragmentos, rendir homenaje a la perturbadora ensoñación que sigue uniendo las voces y los cuerpos de una madre muerta y una hija que la evoca.
–¿Cómo fue el proceso de creación?
–En principio realicé una investigación sobre la literatura de Hebe Uhart, para luego pasar a la creación del proyecto con el armado literario y construcción dramática con los elementos de la ficción - vida de Uhart y porque no, también con las dulzuras y rencores personales que inevitablemente se filtran de la experiencia que integran las mujeres de este grupo: actrices y directora. Para acompañarme elegí una actriz entrañable que formo parte de aquel elenco de los '70, Martha Rodríguez, y una alumna de muchos años, también entrañable, Julieta Alfonso.
En Querida Mamá o guiando la hiedra, el vínculo de una madre y una hija echa luz sobre un mundo trágicamente normal, cargado de acontecimientos mínimos que son contados con ironía, transmitiendo así la opacidad de los hechos de la vida cotidiana, ese devenir afectivo que tan certeramente observa y trasmite la autora Hebe Uhart en sus relatos.
Fuente: Diagonales
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