El montaje se representará desde mañana durante seis meses en la Expo Shangai y tienen una previsión de asistencia de dos millones de personas.
Por EFE
La Fura dels Baus abrirá desde el 1 de mayo una ventana al mundo en la Expo de Shanghai con su montaje Window of the City, el espectáculo más grande que ha hecho este grupo hasta ahora. El montaje, que es representativo del lema de la Expo Better city, better life (Mejor ciudad, mejor vida), fue presentado el pasado viernes por sus directores, Àlex Ollé y Carlus Padrissa. Ollé explicó que el espectáculo se representará cuatro veces al día durante seis meses y tienen una previsión de asistencia de dos millones de espectadores.
El nuevo montaje de la Fura dels Baus se representa en una estructura de hierro de 7 torres, que pesa 30 toneladas, montada como "una Rue del Percebe" con pequeñas celdillas o cubículos en los que se representan escenas cotidianas.
Window of the city recreará "un viaje a través del tiempo y las diferentes construcciones", las cuevas, las estructuras de bambú, arcilla y ladrillo, que envejece y se destruye y acabará con la red humana, típica de los espectáculos de La Fura. Todo ello en medio de música e imágenes que recordarán en algunos momentos a ciudades que han albergado una Expo como Nueva York, Londres, París, Osaka, Sídney y Barcelona. Ollé ha explicado que su referencia a Barcelona irá acompañada de una música que compagina el flamenco y la sardana y de una rumba que dice en catalán "qué bonita es Barcelona". La escenografía central está montada sobre una plataforma que gira 360 grados, de modo que los 1.200 espectadores que habrá a cada lado puedan todo ver lo que pasa en el escenario y se representará en una carpa de unos 4.000 m2, construida ex profeso y levantada como si de una plaza pública se tratara. Los cubículos y cajas en las que pasarán escenas de la vida cotidiana están cubiertas por una gran pantalla led de 20 metros por 10 y un inmenso tul que rodea el perímetro del escenario.
El montaje interactivo compaginará proyecciones de vídeo de alta tecnología y en 3D de Frank Aleu, con ayuda de ingeniería taiwanesa, china y británica. En el espectáculo participarán 60 personas, la gran mayoría chinos, varios niños acróbatas de entre 8 y 11 años del monasterio de Shaolín, así como músicos, coreógrafos y bailarines del país, en una escenografía de Alfons Flores. El montaje narra dos historias, la de un niño ángel que no sabe volar, al que la madre le dice que para hacerlo tiene que buscar a alguien a quien sirva de ayuda, y una niña que ha pasado la infancia viajando a través del mundo. El espectáculo, de 40 minutos, al llegar a la época del bambú deja ver como una serie de artistas se descuelgan por palos o cañas de ese material. Ollé se queja de la falta de ayudas de las autoridades catalanas para el espectáculo, que se está montando desde hace dos meses y que fue encargado en principio al Cirque du Soleil, quien después ha realizado el del pabellón de Canadá. El encargo a La Fura llegó desde una productora china y cuenta con el apoyo del Pabellón de España.
Fuente: MDZ
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